Diaz Valero Alejandro José

Ebriedad compartida

Él bebía en el bar…

con sus amigos,

a ver si podía olvidar

un recuerdo maligno.

 

A diario siempre libaba

tantas y tantas botellas,

y a su esposa la ignoraba,

casi ni la recuerda.

 

Vivía su extraño mundo

metido en una botella

y así entre alcohol y humo

su vida se desarregla.

 

Ella bebía en su casa

mientras él estaba ausente

y ahogaba también su desgracia

entre tragos de aguardiente.

 

Tal vez en su femenino pudor

prefería beber escondida

sin amigos, sin mostrador

oculta en su propia cantina.

 

Cuando la noche llegaba

él iba a casa, ocultando su realidad

y ella allá lo esperaba

para compartir juntos su ebriedad.

 *****