Lissalyh

NUESTRO ENCUENTRO

Es la brisa marina

caricia vespertina

que te he enviado

desde mi playa

a la isla

de tus sueños.

 

El roce del viento

te lleva los besos

que en la arena he dibujado

contemplando el horizonte

anhelando tu cuerpo

en mis labios.

 

El atardecer  matiza el cielo

con fantasías que avivan

tus ojos inquietos

se eriza tu piel

al sentir el aroma

de mi deseo.

 

Un haz de luna detalla

el vaivén de las olas

(del deseo)

y eclipsa su destello

la pasión

de nuestro encuentro.