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¡Oh, sonrisa que alegras el día!
¡Cómo no puedo contenerte cuando estoy feliz!
Contagiosa a la vista,
Iluminas vidas por donde vas
Embrujas a las personas con tu destello
Y animas a los desconsolados
Algunas veces refulges locura
Otras veces exhibes amor
Hay veces que reflejas ternura
Y en otras pides perdón
¡Oh, llanto que reconfortas el alma!
¡Cuánto deseo llorar de vez en cuando!
Limpias el corazón de tristeza
Purificas la mente del veneno del dolor
Y ayudas a decirles a los demás
que tal vez no estamos tan bien como decimos
Algunas veces sales en silencio
A veces extirpas el dolor que nos corroe
Otras veces la emoción no es contenible
Y en otras la ira escapa por los ojos
¡¿Qué sería de nosotros sin llorar ni sonreír?!
¿Cómo alegrar el día o desahogar nuestras almas?
¿Cómo animar al amigo o llorar con él sus penas?
¿Cómo vivir momentos felices sin llorar ni sonreír?
Pareciera que fueran totalmente opuestos
Pero lo cierto es que muchas veces se complementan
Cuando el sol sale con una enorme sonrisa
Y las nubes lloran con la lluvia entristecida
Un arco iris marca el lazo de amistad
Entre el llanto y una sonrisa