Angustia en el alma que florece sombras,
rosas pálidas en el pecho,
cortes en las moribundas palmas,
poco a poco el tren funerario alcanza la estación,
mente en nieblas, pierde peso el corazón.
Gota a gota llueve la tristeza,
sobre el agua se respira y se tropieza,
lluvia apacible mostrando quietud,
ojos inundados sin fuerza, fuerza es virtud,
en las terrazas rosas en agonía,
frio el viento y la sinfonía.
A su pecho las lágrimas apuñalarían,
aun así caminando en el agua que ahogaría,
llueve tan lento que el fuego prendería,
las sombras conmigo bailarían,
hasta que se consuma la energía,
poco oxigeno, suspiro en las rodillas,
el peso sentado en las manos
y las lagrimas del dolor alimentado.
El tren funerario, su humo es lento,
vagón a vagón se lleva un aparte del aliento,
se lleva todo, los instantes , los momentos,
gota a gota se pierden los sentimientos.