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Niebla que cubre mi pasar ahogado.
Entre perturbadoras olas del amanecer
Costumbre maldita de la noche que hiere
Como espinas amargas que cubren mis llagas
Valle oscuro de pensamientos insanos
Que salpican lágrimas de piedra a un mármol
Tan duro y frió como tus manos.
No me des la espalda te estoy hablando
Mírame, mírame a ti te hablo…
No bajes la mirada haciéndome pasar por culpable
Eso nos es sano.
Mírame aun no dejo de amarte y mis manos tiemblan por tocarte
Mis labios sudan y tiemblan al no acariciarte
Que pasa, estas en silencio, no me hablas?
Cada ves que te veo en lo alto te alejas
Cada ves que quiero tocarte te alejas
Hoy la niebla te cubre y no puedo hallarte
Una densa humedad cubre mi copa
No puedo alcanzarte, eres mi luz
En el reflejo del lago puedo tocarte y admirarte
Me conformo que mis raíces puedan tocarte
El frió viento mueve tu silueta tan graciosamente que me
Enamoras día tras día.