Camino por la playa, las olas me envuelven con su blanca espuma, la brisa me dice que tu estas aquí junto a mí, y mi corazón no para de latir, volteo y te veo ahí, frente a mí, me abrazas y me besas, yo solo puedo temblar y sentir… que agradable sensación es sentir tus brazos a mi alrededor, tus manos que lentamente me acarician y me dan una sensación inexplicable.
Nos unimos en un abrazo, entre caricias y besos, entre suspiros y tiernos deseos, me besas…te beso, y lentamente nos tumbamos en la arena, deslizas tus manos por mi cuello hasta llegar a mi pecho que siente que arde en deseo, te acaricio despacio y mis manos se enredan en tus cabellos, tiemblo al sentir tus dedos recorriendo todo mi cuerpo, te metes en mi sangre y eres causa de todos mis anhelos, mis deseos son intensos y me entrego a esta tormenta de caricias y besos, me rindo a ti mi dulce dueño, quiero sentirte pleno, que me tomes y me sientas como me estremezco, siento tu sabor en mis labios y tu volcán en mi cuerpo, se apodera de mi pequeña flor de grana que se ha vuelto fuego con solo tocarla.
Suspiros, gemidos…y palabras ahogadas, somos dos amantes en una batalla, rodamos en la arena que ahora se convierte en nuestra cama, las olas nos cubren y nos acompañan en el vaivén de nuestra entrega entre las aguas.
Penetras en mí como lava ardiente, y te fundes con el fuego apasionado de mi vientre.
Tocamos el cielo con las manos, me envuelves en deseo y amor fusionados, y me entrego toda cual tímida rosa, que sus pétalos abre a su jardinero enamorado.
Nos quedamos tendidos en la arena esperando el alba, y me abrazas y me besas, me pierdo en tus ojos de mar que me embelesan.
Entre la arena del mar nos entregamos al amor más intenso y más apasionado.