Las palabras son cera, los hechos acero.
(Luis de Góngora)
Hay en mis ojos un río
que se hizo llama
inmenso, firme e inmerso
en la desconfianza.
Mi sangre es venenosa, sucia, podrida,
respiro el aire infecto que te sobra.
Te odio con la piel, con las manos, con los pasos.
Te miro fingir de mirarme - me rio para no matarte.
No sabes que mi nombre
se murió en el barro
ahora mismo. En el abismo.
Me llamo Rencor , Rechazo, Olvido,
Rabia.
Soy el vagabundo que te roba,
el rostro del desprecio,
el precio de la indiferencia,
la flor marchita que echas.
No soy el niño que imaginas,
tengo diez años que valen por cien,
nací con la vejez pintada en la cara.
Podría ser un asesino
como si nada.
Soy el perro envenenado
que te muerde el cuello,
soy aquello que quemaría tu casa,
tu sonrisa, tus cosas.
No soy un poeta, no hablo,
escupo.
No soy tus versos,
no escribo, no pienso.
Tampoco soy tu misero intento
de pintarme el alma.
Mi alma se fue al carajo.
No soy NADA.