Dicen que el amor todo lo cura
aunque hay quien aún lo duda;
pero da remedio a la locura,
aunque a veces, altera la cordura;
cura corazones mal heridos
devolviendo todos sus latidos,
limpia las manchas de la consciencia
si sabe aplicarse con paciencia;
si es correctamente aplicado
al orgullo fácilmente lo deja derrotado;
incluso hasta la hepatitis cura
con abrazos llenos de ternura;
solo hay que aplicarlo suavemente
en el alma de en quien se piense.