Este mundo es el cuerpo,
el otro es la mente, éste
quiere colaborar ideas
fantásticas,pero áquel
no lo deja, por las ideas
centralizadas en sí mismo.
Si tú haces actividades buenas
aquí en la tierra, se está reflejando
en el mundo espiritual, lo cual
no vemos, pero existe. Tu espíritu
con luz intensa te hará revolucionar
tu conciencia para ver este mundo
diferente.
Si tú haces actividades malas,
también te reflejarás, pero
no con mucha luz, por eso
cambia tu atictud para el bienestar
propio, y porque no, ayudar a los otros.
El mundo paralelo, tú lo determinas,
no es otra persona, sino tu determinación
de ver un mundo ideal para las futuras
generaciones.
5-octubre-2011
GONZALO PEREZ ALARCON