Traigo el infinito trenzado
y sus ramas creciendo en tu beso,
un despliegue de cielo en las manos
y un ocaso aquí, donde te sucedo.
Vengo desnuda de nada
y repleta de infinitos,
a vestir de mimos la palabra
que versean tus latidos.
En pie de paz y horizonte,
raíz de soles brotando lunas,
saliendo a la lluvia de las noches
las constelaciones que nos aunan.
Soy las piernas de tu infinito
y camino los pasos de tu sueño,
tu eres dueño, eres alma, eres sentido,
yo soy hilo del amor cosido al vivo
Esencia.