bonifacio

El fantasma del olvido

Había una vez un fantasma

Que vivía en un castillo abandonado

Deambulaba

No añorando su pasado.

 

Pero un día

Dos señores concentrados

Conversaban

De asuntos reservados.

 

El castillo se vendía

Y uno de ellos parecía interesado.

 

El otro era abogado

O vendedor de castillos desolados.

 

El trató se cerró al parecer

Con papeles ya firmados.

 

Los humanos llegarían

Invadiendo su reinado.

 

Un mes después

Dos camiones de mudanza

Sellaron la esperanza del fantasma

De vivir en solitario.

 

El señor de la otra vez

Había llegado

Con toda su familia.

 

Dos corsarios

Y una niña de blanca palidez.

 

El fantasma ahora el sueño no concilia

Con la hija del burgués.

 

Que terrible ser fantasma y querer

Regresar a ser humano.

 

Que tamaña intrepidez.

 

Consultando algunos libros de alquimia

Descubrió que aún podía

Si quería

Ser un hombre nuevamente

Con la sola condición

De volver en la vejez.

 

Un demente lo querría

Y se mudó

Al castillo de el frente.

 

Allí se olvidaría del amor

Sin tenerla a ella presente.

 

Y el olvido

Se quedó en él para siempre.