Como cada noche estoy
contemplando el cielo y sus estrellas,
contemplándote
en cada una de ellas.
No habrá momento ni espacio
que no existas para mí.
Como cada día voy
pensando en nuestro encuentro;
y es así, me haces falta
en este momento.
Creyendo que todo es un cuento.
Como cada tarde,
ya se oculta el sol,
y tu mirada se aparece
desde el cielo,
observando como estoy
perdido e ilusionado.
De esa estrella se ha apagado
una radiación que era tu mirada.
Como cada estrella estás tú,
allí, radiante e inesperada.
Veo nada y a ti te veo.
...Que el amor no es locura,
y que ésta no se apodere de mí.
Inevitable es lo que siento.
¡Enamorado yo de ti!