Alba… predice radiante al imponente,
luz del dios con sus rayos portentosos
aparecerá en otro día más envolvente,
con esa claridad que hoy mi alma siente
entre espacios de silencios tormentosos.
Ya no están los intervalos angustiantes,
las cargas de peso pasadas en quimeras,
autoras de lamentos iguales a vidrieras
rotas por lágrimas amargas y abundantes.
Ahora el quebranto se marcha de la teja,
esa que ardía en sus castigos lacerantes
pues el amor lo maldice, lo larga… y lo aleja.
Con las penumbras alegres y danzantes
hay un nuevo amanecer, como anhelada salida.
Alba… diferente… hoy siento amor en mi vida…
Alviz Neleb
Octubre 11 de 2011
7:25 a.m. - Martes