clonariel

SONETO ESTACIONAL

Te huelo primavera en cada labio

enamorado, en tu penumbra

de estrenada permanencia,

en soles florecidos. Eres inmensa.

 

Trenzas la fiel lumbre del día,

emergiendo paso a paso del cuello

espigado del tiempo; envías agua

de los sembrados ríos del aire.

 

Pleno pétalo silvestre. Verde iris.

Las manos acarician tu cuerpo,

aprietan los pies tu largo vientre

 

de verde seda. Llueves los ojos.

Bañas de horizontes esenciales

vivaces retoños, tanta vida.