En un pueblo en las montañas... muy lejos de de aqui y de alli... hace unos años atrás... otros tiempos... hace tiempo y a lo lejos... muy lejos...
Había un corral... con muchos animales en el... había pavos, gallinas, gansos, patos... si vieran que hermosos animales... habían en este corral...
Un día pasó por el lugar un señor muy elegante, morocho y con bigotitos... estaba de paso con su automóvil... pero el vehículo se averió en la ruta muy cerquita de este lugar de ensueños... y bajándose del mismo... observó y vio a lo lejos una casa con grandes terrenos... y un caminito que llevaba a ella, al costado de la ruta... llegando a la casa ya cansado de andar... se acercó a la puerta... y llamando dos veces... espero que alguien se asomara a recibirlo....
Juan abrió la puerta y se encontró con este traunseunte quien le solicitó ayuda... y le contó lo ocurrido con su carro... y que necesitaba un teléfono para comunicarse con alguien que pudiera venir a auxiliarlo... ya que su telefonía celular no tiene señal en esos lugares tan alejados...
El dueño de casa le permitió pasar y le ofreció algo para tomar calentito... ya que afuera hacía frío... y entonces... mientras llamaba a un mecánico de un poblado cercano... quien aseguró que llegaría en unas horas...
María, la esposa de Juan... enseguida se preparó para cocinar... ya que el visitante... llamado Alejandro... debía quedarse en la casa hasta que pudieran arreglarle su auto...
Mientras Maria fue al corral a buscar un lindo animal para realizar la comida... cuando regresa a la cocina con el pollo para pelarlo ya que tenía el agua caliente preparado...
Juan y Alejandro estaban contándose sobre sus actividades... Juan comentó que el se dedicaba a su granja, al cuidado de los animalitos meintras su esposa María se dedicaba a la quinta... que usaban para su consumo y para cuando llegaban... desde el poblado cercano a buscar su producción...
Alejandro les contó que era escritor... escribía cuentos... fábulas... poemas... y de echo llevaba una agenda donde tenía algunos escritos alli... los que les mostró al matrimonio que pidieron les escribiera algo sobre ellos... a lo que contestó apenado Alejandro que su lapicera se habia quedado sin tinta...
María con una carita picarona... le dijo y si le regalara una pluma de su gallinita podría escribir si le acercaba un tintero... a lo que dijo el Cuentista... que con todo gusto el escribiría solo si la pluma fuera especial...
Pero si creo que fue una gallina especial... una gallina mágica... pues asi lo deduzco el escritor... y apartir de alli en su casa escribe los borradores con esta pluma mágica... pues gracias a ellas los cuentos son cada vez más maravillosos... no solo es por la escritura también se debe a la gran inventiva de Alejandro...