La Reina es la abeja
que procreará,
será el zángano
quien la fecundará;
el zángano es gordo
feo, barrigón,
con ojos grandotes
no tiene aguijón.
A veces a los huevos
les da su calor,
mientras las nodrizas
harán otra labor;
el néctar y el agua
lleva a las obreras,
lo pasa por sus buches
así se hace la miel.
La dulce obrerita
llega hasta el panal,
la abeja Reina
la empieza a mandar,
ella quiere siempre
todo en su lugar,
porque así la miel
nunca sabrá mal.
Las abejitas
viven en sociedad,
se comunican
por complicadas danzas,
así es como informan
la fuente, dirección,
cantidad, distancia
dónde el néctar está.
Hay un transporte
para el néctar llevar,
que llegue sano y salvo
hasta el panal,
son las obreras con
su larga lengua,
las que lo recogen
y llevan en sus patas.
Otras abejitas
cuidan el panal,
que es la casita
donde hacen la miel,
y quien se atreva
a molestar,
un gran ejército
los sale a castigar.
RESERVADOS TODOS LOS DERECHOS DE AUTOR:
MIRIAM RINCÓN URDANETA.