Por cierto, nada cene este noche
y la nada que cruel sabe,
El olor de la mesa vacía
resuena a disonancia
Su gusto fue extraño (lo de siempre)
mezcla rara de soledad,
y también melancolía...
Soledad que alimenta la nada...
Nada que esperar
Más que el viento
Que me recuerda que respiro
su fragancia a olvido