nelida anderson parini

CHAPARRÓN VERANERO.

Brioso el potro relincha en el potrero,

con desparpajo se aproxima el jinete.

Celoso el Tata, presiente el aguacero,

la humedad se huele en el ambiente.

 

Cálida brisa agita el bosque entero,

ya la hojarasca cruje tímidamente.

Baja el ganado hacia el abrevadero.

¡Un resplandor de luz incandescente!

 

La vaca muge, llamando a su ternero.

Entona el cielo su canto complaciente.

¡Notas de luz, chaparrón veranero!

 

De su humedad renace el sabanero.

Sal piquetear melódico, estridente,

¡Coro estelar tan súbito y ligero.