Eduardo Urueta

Prisionero

Las casas de color son tus ojos

el matrimonio de la tierra con nosotros.

¿Te acuerdas del hombre fantasma que aulló contigo

su sueño caliente de morir en el Callejón del beso?

 

Toma este dolor

toma esta voz de hierva

toma este polvo de México, la capital,

y guardalo donde dore el sol su tiempo

Víveme, entonces, tan dentro que te quemes

 

Ya viene el sueño

el enfermo que agoniza

ya viene tu ceja a sacudirme.

El verdadero centro del país

!tus ojos!

amor que no respiro.

 

Ya viene la muerte y no quiero abrirle los brazos

sin conocer el acento de tu voz

quiero swer prisionero de las ansias conocidas.