Eres la esencia de lo que trajo el alba
la complicidad de un destello imaginario,
ruges entre las potestades
como aquel rey virtuoso,
sin temores ante los desafíos
hay desenfundado tu espada,
derrotas a fuertes y temidos
a las alas perversas del destino disfrazado,
engarzas una a una perlas de amor
en la rivera del tiempo.
Cantos de la niña mágica
entonas en las arenas,
firme es el paso
que han llevado tus pies en las alabanzas
de la antigua época.
Rudo y con acero templado
te han forjado en los fuegos rojizos.
Que grande es tu raza
tu belleza de hombre,
diferente y místico
envuelves los destinos.
Guia de la reina
protector de mi vida.
Destino implacable
de bella sonrisa.
Eres el hombre
aquel que forjaron
entre gitanos te mueves
a las doncellas desvelas,
por un solo beso de tu boca ellas suspiran.
Más eres el guerrero de un solo amor.
Bendita sea tu raza hermoso caballero.