Tengo algo de ti y no plagiado,
una enfermedad del corazón
llegada con la brisa en la ilusión;
un mortal virus, me ha contagiado.
Y es que ya sé, me lo he buscado
con alevosía y clara premeditación
por llegar a hacerte mi declaración:
virus de amor y estar enamorado.
Así sea un mal que es permanente
no es daño de mala envergadura
aunque su efecto sea persistente.
Es un ataque, aparenta la locura,
para afectar el alma es insistente.
Virus de amor necio… y da sin cura…
Alviz Neleb
Octubre 22 de 2011
9:32 p.m. - Sábado