Desde este mar donde los silencios,
arrebatados y empujándose me atropellan,
donde tu recuerdo me llega y me llama;
donde tu figura se hace todo
y ese todo se esfuma como la nada.
Desde este mar de preguntas sin respuestas,
triste paisaje que ha perdido su melodía,
como tú la sombra de tu risa,
el calor de tu mirada, la magia de tu verdad.
En esta atalaya de profunda soledad
donde el mar no sabe a sal,
y donde el cielo busca su azul,
yo espero, como siempre espero,
relamiendo mis lágrimas,
ver tu barco alejarse persiguiendo su derrota
sin poderlo evitar.
(jpellicer)