Ramón Bonachí

HABLANDOME SIN DECIRME NADA

Un nuevo día despierta
con el primer rayo de luz
posándose en mi tejado ,
el sol se une a la fiesta
que ha montado el ruiseñor
y  con su canto despierta
las flores de alrededor.

Yo  de pie observo
como todo sigue igual
mi reloj parece parado ,
pero si hay algo que me sobra
es la santa paciencia
de saber estar quieto,
mientras miles de hormigas
desfilan como locas
jugueteando a mi lado.

Soy un ser extraño
no tengo ojos para ver
y me falta la boca para gritar,
pero soy un ser  vivo
viviendo como vos
en esta tierra de Dios,

También existe el miedo por aquí ,
esas bocas de acero
con dientes de tiburón
están siempre cerca de mí,
pero de momento sigo de pie
y vivir es mi esperanza
porque yo,carezco de venganza

Ante tu presencia
y no he perdido la razón
me presento desnudo ,
aun conservo el regalo
de ese dibujo gravado
en forma de corazón,
mezclada tu navaja con mi sangre
dos iniciales  guardan
el secreto de un hombre.

Mientras mis años duermen
en un mundo incierto
los tuyos echa a andar,
mientras beso los labios
de una nueva primavera,
a ti un nuevo otoño
tu pelo cambiara.

mientras veo los años
pasando por tu  vida
como si cortara el viento ,
yo me acompañare aquí
del sonido del grillo
en noches de luna llena ,
seguiré teniendo en el tejado
la voz del ruiseñor pesado
hasta que acabe el día ,
me mostrare desnudo y derecho
para que alguien dibuje  como tu
otro corazón en mi  pecho.

Hasta que para mi
la ley del más fuerte
llegue  sin avisar,
entonces me dirá la muerte
mi querido amigo
se acabo tu suerte
no esperes la primavera
porque hueles a madera.