Déjame enseñarte, si pudiera, ser instante;
Verlo todo distinto, sin alejarte, abrazar esta metáfora,
atravesarte con mi alma, y con mis manos acariciarte
poco a poco, abarcando todo ese infinito.
Joseme
…detrás de cada escombro de mi vida
un insipiente momento –un instantáneo olvido--
Todo pasó de prisa al igual que cruzan los minutos
sobre la acera de tu brazo tibio
¡no hay urgencia mujer por encontrarte!
Sólo sé que aprendí a escuchar
el latido de tu corazón tras de tu prenda
¿qué frágil minuto para estar contigo?
Mujer de noche en noche
sólo calenté mi soledad entre tus brazos
¡y déjame decirte! Que la huella dactilar de tus dedos
es un invierno
que en mi piel se abisma.
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Sergio Jacobo “elpoetairreverente