Al contemplar tu silencio
Sentado, en tu aposento, tan serio
Concentrado, tan callado, tan sorprendido
Con tu libreta y pluma en mano.
Llenos de aquellos, ardientes deseos
Por alguien que te lo ha trascendido
Te encontraste absortó
Ante mi fugaz reacción,
Pero apetitoso, a mi cometido,
En la espera de ser explorado
Por el sentir anhelante
Deseo romper tu silencio.
De ir lentamente y sorprenderte
Deslizante como suave brisa
Mostrándote mis atributos,
Y abordarte sin medida
Ante tal pasión impartida
Entrelazando mis manos
En la planicie de tu dorso
Y conjugar un verbo nuevo
En la espesura de tus rimas
Abrigar tu aliento, en delicadas fragancias
Intuir tus designios ante tal figura
Sedienta de la primicia de tu esencia
Por las alborotadas ansías de tenernos
Habiendo despertado de tu silencio
En una llamarada sin fin, desmedido
Ante la majestuosa complacencia
Adquirida de dos que se comprendían
Por la abrasadora pasión
Que los consumía.
Iven M.