Por temor a perder la cabeza Juan se quedò callado.
Doooooooondeeee esta aaaa Fray repetía una vez màs el príncipe. doooooondeeeeeeeeeeeee diablos sssssssssss esta Fray exclamaba...... fuertemente el príncipe.
Y ninguno de los servidores del príncipe decía algo.
¡Todos quedaron completamente callados.!
Al ver ese silencio, el príncipe se disgustó tanto, que ordenó que le decapitase la cabeza de Juan;por no haber estado pendiente de Fray.