Pateando latas en la calle
sentado solo en cualquier valle,
recuerdos vienen a mi
de cuando yo te conocí.
Tu tímida y temerosa mirada me sedujo
y a amarte rápidamente me condujo,
tiempo después juntos ya nos podían ver
tomados de la mano, viendo el atardecer.
Poco tiempo duro lo nuestro
pero siempre lo tendré aquí dentro,
no porque así yo lo quiera
sino porque no encuentro la manera
de mandarte al olvido
ni de borrar lo ocurrido.
No encuentro la manera de olvidarte,
No encuentro la manera de borrarte,
No sé cómo seguir adelante
No sé si esto mi corazón lo aguante.