Quise regalarte
en el eco de un suspiro
una melodía
que erice tus sentidos.
Quise rociarte
con la fragancia de un sueño
una caricia
un suave roce de mis dedos.
Quise humectar
tus valles y senderos
con mis labios
tan llenos de deseo.
Quise estremecer
tu piel en mi cuerpo
te quise… ¡te quise tanto!
que muero por dentro
al verte ¡tan cerca!
y saberte tan lejos.