Silencio sutil de la noche,
estrellas fulgurantes que vigilan y dan su luz en un derroche,
derroche de caricias y besos, de ilusiones y sueños...
que terminan siendo un suspiro dulce como un estruendo.
El viento trae a mi tu esencia en la brisa,
y las rosas del jardín dejan salir su más bella sonrisa,
yo evoco tu silueta junto a la mía,
y dulcemente te abrazo y sutilmente te dejo mi más cálida caricia.
Cierro los ojos y sigo soñando contigo
quiero amarte y decirte te amo,
quedarme en tus brazos y amanecer a tu lado...
pero todo es un bello sueño del cual despierto y tristemente no te encuentro en mi regazo...
no tengo tus besos, ni tu cuerpo ni tu aliento... ni un te amo,
cuanto daria amor porque la distancia se esfura, y estuvieramos juntos los dos...
amandonos siempre en la imensidad con todo nuestro amor.