Angel drew rolfs

MENTIROSO


 

 

Oíd lo que dice el destino, tiempo invalidado por las gélidas acciones de una mente perturbada. En los cajones de la vida se guardan muchos secretos, donde un manojo de llaves baila al compás de la tentadora ansiedad de acaparamiento, que la sed de intriga impulsa a abrir. Serpientes heladas que corren por el espinazo… manto de miedo que arropa la soledad… ojos que expulsan dolor supremo, fuego de ira, locura y vanidad.

Oscura dama que se viste de insomnio, perpetra el pensamiento el flagelo, el castigo.

Tortura interna, vil demonio, corazón enredado con espinas de abrigo.

La tentación poseyó a este ser, que como una marioneta fue manipulado.

En los terrenos del amor creyó que había triunfado, cuando se dio cuenta de las incompetencias del ayer. De las mismas salió muy malherido, cicatrices y llagas quedaron grabadas en su cuerpo. Espíritu apasionado destruido, el rencor enciende su fuego con el tiempo. Las acciones del pasado inciden en el futuro, pobre ser que dejo capturar nuevamente. Ya su cansada y debilitada mente, se fueron induciendo en un mar profundo y oscuro.

Sol que sale en la tormenta, se arrima tarde la suntuosidad. Aquellos oídos que no escucharon hacia dentro, se perdieron el clamor en la tempestad. El mal se lava las manos, lame su cuchillo bañado de sangre. Seleccionó su victima con avidez y hambre, ahogó su honor en los sucios pantanos.

Desnudo el final quedó al descubierto… un halo de luz cubre al hombre bondadoso.

Que con el agua de la verdad cruzó el desierto, para dejar de ser… aquel mentiroso.