Tengo un beso cautivo
entre mis labios ansiosos,
deseo necio,
que quiere galopar
como corcel enamorado,
a despojarle de un beso
al rosal celestial
de su boca,
Quiero escribir un verso
al beso que no he otorgado,
y hacerlo volar enamorado
para posarlo callado,
sobre su tibio lecho.
Este beso que se desvela
que es fuego que se derrocha
y se guarda ansioso
por descubrir,
el placer,
que esconden sus labios,
de entelequia.
.Mi guitarra vieja,
canta una canción nueva
y florecen las amapolas,
que estaban dormidas,
sobre mi piel en expectativa.
Esta espina que no hiere,
esta cadena que no es condena,
este beso apasionado,
desea verse enmarañado,
entre las flores prisioneras,
que hay entre su esbelta silueta.
Este beso que se esconde
tras los barrotes del decoro,
algún día volara hacia su cielo
y se prendedera,
como un manjar de fuego
entre su piel de embeleso
y los deseos despiertos,
dentro de sus blancos pechos.