Sé que poco a poco entrare en tu corazón, abriré un camino de esperanza y lo llenare de rosas por amor. Aunque suena tonto y muy descabellado, estoy seguro que pronto estaremos juntos y enamorados.
No soy tu príncipe azul, tampoco seré un galán de telenovela, tan solo soy un escritor que se inspiró en tu belleza. Y con estas letras espero que los días pasen deprisa o quizá lento, que las rosas marchitas vuelvan a dar pétalos y que la luna se quede en silencio.
Que por el día llueva y se mojen tus cabellos, con la cálida armonía de las aves del cielo; y, por la noche los relámpagos y truenos griten tu nombre como a un lucero.
Porque eres como el mar, como la flor, como las nubes, como aquella estrella que vi desde lo lejos, eres lo que más anhelo, lo que más deseo, lo que más quiero. Creo que simplemente estoy enamorado.