El Hombre de la Rosa

¡¡¡ YO CONFIESO !!!

*PECAR*

La negrura de mi aliento se lava al confesarme

en la ermita de la fe se arrepiente hasta el aire,

qué triste queda mi yo vestido de blanco mate

con la pana recosida de una blancura de nadie.

*FALTA*

Yo me puedo malear sin tener que confesarme

con dueño de sotana que trata de sonsacarme,

mis errores capitales son provincianos de oficio

trabajar muy de mañana y fornicar por la tarde.

*YERRO*

Que la bendición del cura la recojo cuando sale

el que sana los deslices al revelarlos tan tarde,

los acólitos con furia te apagan las velas antes

para partirse de risa un Prócer que todo sabe.

*DESLIZ*

Quien pretenda lavar la seriedad del hombre

que se aventure a preguntárselo a sí mismo,

no es cristiano manipular la información vital

acogiéndose al perdón del ser que los creo.

*CAIDA*

Hasta el Santo Padre de Roma es algo falible

porque es arte y sangre del pecado original,

sólo la efusión cruel de una pira inquisitorial

podría justificar aquí esta injusticia de culpa.

*DOLOR*

 

Autor:

Críspulo Cortés Cortés

El Hombre de la Rosa

7 de noviembre 2011