Serenata sin luna
En un balcón de amor,
Tu cuerpo de diosa
Me entrego su candor.
Sentí en el alma tus besos,
Sentí en mi vida tu pasión,
Sentí que tan solo eres mía,
Sentí de nuevo la ilusión.
Hoy tan lejos de mi vida,
Hoy tan lejos de mi lecho,
En el desierto puro y blanco
De mis sabanas estas dormida.
En mi existencia de poeta
Mis rimas te aclaman;
Un suspiro, una llamada
Que salga de tu alma.
Mi mujer, mi bella dama
Alegras mis taciturnos días
Con una breve esperanza.
Sara te entrego mi alma.