¿Por qué me piensas, por qué me extrañas?
¿porque te entregaba siempre el alma?
¿Por qué me piensas, por qué me extrañas?
¿porque mi corazón siempre te ofrendaba?
¿Por qué me piensas, por qué me extrañas?
si en otros brazos te metes en las mañanas
¿Por qué me piensas, por qué me extrañas?
si bajo otras sabanas de mi te apartas
¿Por qué me piensas, por qué me extrañas?
si quizá conmigo solo juegas y me engañas.
Porque me piensas, porque me extrañas
pero no me regalas ni un par de palabras.
No reprocho que me estés pensado y extrañando,
pero no logro comprender que está pasando,
que bajo otros brazos tú te estés refugiando
y que guarecida en ellos tú me estés pensando.