Manuel A Gonzalez P

Un Susurro

En la huida de mis versos yace el motivo

encerrado en la memoria y el engaño

se escuchan lejanos los llamados del destino

dudo proseguir mi leyenda ante tanto daño.

 

Aprendi de mis vivencias en mi corto sendero

que los golpes son heridas no tan graves

pero el despecho y el rechazo son veleros

que navegan sin receso en viento suave.

 

Y agitados por mareas golpean mi tierra

con el arte destructiva durante su jornada

¿podré acaso encontrarle paz a esta guerra

sin que el amor me hiera con su filosa espada?

 

Señor, dime tú, si cesara mi angustia tu cielo

o si la horda queme con sus años mis recuerdos

hasta que perezca mi cuerpo en sublime anhelo.


O dime si a mi tiempo un nuevo camino le prefieres

con un prospero deseo que cure lentamente este veneno

hasta que mi alma en su final a tus manos llegue.