Habitare en el desierto,
El sol no quemara
La arena recordara
Que soy polvo.
Por momentos se me antojara vestirme con su color
Sin embargo el sol tostara mi piel
Soy este paisaje
Silencioso lleno de pocos colores
El azul y canela y mi piel.
Escucharé en la noches los insectos
Que podrían desangrar mi piel
Sin embargo lo que lograrian es darme una nueva piel
La que necesito para vivir allí.
Es la alquimia interna
Buscando la piedra filosofal de mi existencia
Aunque me la han contado mis abuelos
Me llama a transformar
No solo lo que no me gusta
Sino a verme desnuda
En un medio hostil en cuya belleza
Se halla la transmutación del alma.
convergería en una nueva vida para unirme
A este paisaje;
Que baila con el viento.
Se aquieta ante el sol.
Se abre para dejar salir en la noches
a quien han formado su hogar alli.
Seré entonces el rio que le cedió el paso
A una nueva forma de vida y dejo su manantial en cada grano de arena.
Para estrecharsen y no dejarse morir.
Viviré para conocerme a mi
y crecer junto a ti.
Sin embargo no seré aquella mujer
Sin Dios del cielo.