- INDESLAZABLE -
El tiempo no tenía lugar,
embalsamado se suponía
en su cutis de polvo,
escuetamente esperar
deshojando males en las flores
al asiento de la fría lava de la vela
que tiembla ensombrecido a Baudelaire.
Un estremecimiento
intuido de costado,
un verso.
Y sueño, sueño,
sin pesadillas que despertar.