Quise decir tu nombre
pero pusiste una mano en mi boca
Callandome...y suspirando.
Mis palabras se perdieron entonces
entre suspíros nuestros.
Solo vos y yo,
ardiendo juntos...
en nuestra sitio,
Nuestros sentirnos increibles.
Jadeantes o tranquilos
pero siempre,
conteniendo todos los besos
entrelazados en mimos.
Quemando en el,
y en su atrevimiento.
Sin reconocer mas fronteras
en nuestro abrazo sin tiempo.