omu

Bajo aceras


Ciega del firmamento; está mi vista.
Del azul extraviada; cuando yo entro;
y descendiendo escalones me sumerjo,
para hallar un espacio de ruidos y silencios,
que alternantes pasean rellenando
larguísimos pasillos y los huecos.
Cobijo de calor; al imperar el frío.


Ticket de diez viajes,
billetes sencillos
o abonos mensuales.
El fumar prohibido,
igual que colarse,
porque si lo han visto,
cabe nos multasen.


Espacios de billetes y pitidos,
tenuamente sujetos a amarillos,
que con plásticos y duros tornillos,
se agarran ¡como arañas! a altos techos.
Alumbran los andenes que dormitan
en la oscura estación de aquel trayecto,
quedando rezagada por los túneles.
Atenuada su luz; transporta sentimientos.


Para señora preñada
o invalido se acercase,
un buen asiento les valga,
y así, sus piernas descansen.
Espacio para el carrito,
donde el bebe se acomoda,
en colchoncito mullido,
con su chupete en la boca.
Y en el vaivén de vagón,
vapor de sudor combina,
con las canciones de amor,
que trovadores musican.


Billetes esparciendo tantos hombres,
un pasaje que lleva a otro lugar,
ya fuerase hacia el ocio o el trabajo,
-solitarios, contentos o enfandados-
a encontrar novedosos aledaños,
compañía, frescura, guerra o serenidad.


Arrinconados vomitos,
de la festiva semana,
y muy apartadas de ellos,
-bajo minuscula falda-
negras, preciosas medias,
cubren las esbeltas que andan.


Las nubes -aquí abajo- se elaboran entre humos,
y explosionan chirriosas por música de trenes,
que enlucen el metal, de las rutas que hay en vías.
Y estas usan aromas de papel,
que cuelgan comerciales y atrayentes,
llamando al pasajero -como a un cliente-
de manera formal, muy convincente,
para compre al salir -siendo decente-


Disfraces y tribus varias,
aquí comulgan distintas.
Y el simple guiño de un ojo,
cual rebasa todo escollo,
seduce a timida joven
consigue sonrojo asome.


Polifacéticas resultan sus caras.
Igual suenan acordes de guitarra,
que un mendigo unos céntimos reclama,
o un ladrón, astuto y hábil ufana,
la cartera de aquel que dio su espalda.


318 omu G.S. (BCN-2011)