Apreciando tú retrato plasmado
en un hermoso papel marcado
colgado en la pared de la casa la cual
me vio crecer y luchaste por muchos años,
Pensando en tantas cosas
que me has enseñado y gracias
al desvelo habemos muchos
agradecidos de haberte tenido...
Tantas historias con las cuales
fantaseamos todos aquellos los cuales
no sabíamos realmente diferenciar
entre la realidad y el momento de soñar...
Solo niños que no nos dábamos cuenta
si lo que hacíamos era para ella
una alegría o más bien rabias cada día...
Me alegro cuando veo en mi mente
tantos momentos felices que pase
abrazado, apreciando a la gran madre
que dios me había regalado,
esos momentos no los cambio
más bien los comparto para
que se den cuenta de la hermosa madre
que por privilegio mío, tuve conmigo...
El tiempo ha pasado muy rápido
pero aun así tu imagen nunca
de mi mente y corazón me han dejado....
Gracias a ti por ser
la gran madre que todos
seguimos amando...