Estaba mirando el sol y lo vi muy distantes de la tierra.
Pense en tu amor y mis sentimientos me dijeron que estabas muy cerca de mi y que era lo que importaba.
Estabas pegada y calcada en las entrañas de mi alma, en mi aliento y en mi halito de vida como el todo de este mundo, como la razon del viento y de la sangre y era lo que me hacia feliz. No es dificil de explicarlo porque en las noches cuando duermo te veo reflejada en mis sueños y al despertar, todavia siento las sabanas con el calor de tu cuerpo y la fragancia del perfume en mi ventana como si todo fuera real. Se que cuando el mundo esta dormido, nosotros nos buscamos en el pensamiento, y es alli donde sentados hablamos de nuestros sueños y de lo que no soñamos. Muchas veces te he sentido llegar envuelta en diademas blancas a mi cama y sin decirnos una palabra, viajamos al refugio secreto donde solo los dos sabemos llegar cuando los ruidos no dejan escuchar los latidos de nuestros corazones. Te amo y tu lo sabes, a pesar que el tiempo a pasado volando en trenes y en campanas cruzando mares y montañas, yo te he esperado acostado en la arena mirando las estrellas y sobre ellas pasar mil gaviotas con mensajes imaginarios diciendo cuanto te amo cuanto te deseo. Estoy contando entre mis dedos el tiempo y en mi corazon conjugando las palabras para el dia del encuentro. Estoy prendiendo velas en las cuatro esquinas del mundo para no perderme del camino, este que me llevara al fin de los caminos porque alli me quedare dormido en tu regazo para siempre.