La noche tiene una extraña pena. Akllar
El astro noctuno asoma su rostro en el mar.
Es un gran piano de plata la luna llena
meciendo a las olas con su cantar.
Un coro de nubes avisan que la estrella,
ha partido del mar hacia la luna bella.
Y suena el piano con estruendosa armonia.
Es un concierto a la esperanza y melancolia.
Los seres despiertan del acuatico jardín,
hechizados por la fuente secreta del Hamelín.
La estrella enseña su equipaje a su luminoso destino.
Es el ayer y el horizonte convertidos en viento marino