Donde están los verbos de tu sombra
Tu mirar de hembra guerrera
El aliento ardiente de tus besos
Y tu piel cual leña de hoguera
Donde los susurros de poemas
Que a mi oído avivaba mi flema
Donde tus traviesos roces
De rodillas y piernas
Donde están tus dudas
Prendidas en las alas de mi abrazo
Donde tu alma desnuda
Deseando ser tomada por la mía
Donde tus labios en promesa
De amarnos hasta el nuevo día
¿Dónde estás?
Ven a terminar mi agonía