mientras ciento y observo como huyes de
mis brazos,
una afilada brisa fría de soledad me invade,
una gota de lagrima enfurecida se desliza por la mejilla,
como arrodillas clama tu piedad,
y como primavera en otoño,
la flores borran sus sonrisas al ver que te vas,
mientras te alejas, en cada paso que das hay
una huella de triste recuerdo que vas dejando
si pudiera dedicarte mi poema,
sería como besar tus labios
y sentir las estrellas en mis hombros,
si pudiera dedicarte mi poema,
es como tocar el palpitar de tu corazón,
saber que cada pensamiento lo pudieras escribir
en tu diario de amor,
te vas alejando de mi,
y solo tu sombra me dices adiós,
hasta tus huellas son borradas como envidia
por el viento,
pero es hora de decir adiós.. Son espinas clavadas en el corazón, pero es hora de
decir adiós,
como un disco de música gira la vida,
y son golpes de vida que aprendí,
pero la luna y las estrellas son testigos de lo que fuimos,
después de todo soy alumno de la vida.
willy mejia