PAPA
Desde aquel día cuando las mariposas
Bajaron sus alas y el arco iris escondió
Sus colores para guiar tu alma a la eternidad,
Mi vida nunca volvió a ser.
De la mano de mi pena con mí
Mi cuerpo desvalido busco tu amor
En cada trozo de mi corazón roto.
Entre las cenizas de mi alegría
Encuentro resignación que no acalla
El dolor.
En la Aurora me despierto con beso
Tuyo que trae el primer rayo de luz
Y en el ocaso te beso la frente con mí
Último estado de conciencia.
Siempre,
Bajo la sombra de mis años busco
Tus recuerdos para darle compañía
A mi soledad.