Para tus labios que encienden mis besos
en rosas abiertas con sutil fragancia
que llenan mi vida de dulce embeleso
reflejo dulce de nuestra constancia
esa que nos une pese a la distancia.
Tus labios ambrosìas prometidas
manjar de los dioses alimentan mi amor
y con delicadeza curan mis heridas
olvidando asì del ayer todo dolor
cuando me besan llenos de fervor.
Tus labios dos petalos de una flor
los mìos, mustios, callados sombrìos
pero que recobran su vivo color
dejan de ser tristes dejan de ser frìos
cuando con un beso, les das tu calor.
Tus labios sonrientes prodigan a mi alma
belleza luz y calor cuando asì me besas.