Abel Niquinga Ruiz

…clamor del eco ausente…

…clamor del eco ausente…

…al fantasma de tu sombra…

 

…ser tuyo mujer…

…es sentir el fuego sin ser la chispa…

…la furia maldita en la sangre de la tierra,

…un inmenso rayo de gota de luna…

…la asfixia eterna…

…en la fosa de tu conciencia…

…es ser la caricia pequeña como trueno de semillas…

…sobre tus ojos de profundas flamas…

…y la suplica de un mendigo…

…que tiende su sonrisa hacia el alba...

 

…ser tuyo, estigma…

…es sentirse mendrugo de amor…

…frente a las olas de tus labios…

…es quedarse en harapos…

…de dulces intenciones…

…cuando interpreto las madrugadas…

…sin la venia de los dioses…

…indefenso en la quebrada…

…de tus huesos y mis carnes…

 

…ser tuyo, ficción…

…es resbalar la lengua…

…de exuberantes suplicas…

…sobre la lumbre de tu “arbusto”…

…empañada de enervaciones…

…es convertirse en macizo…

…para que alcances las nubes…

…y respires mi inocencia…

…oculta por las devociones…

 

…ser tuyo, macilenta…

…es ser el escarnio del hambre de cada día…

…la hipocresía dulce del veneno de “buenos días”…

…el fastidio atorrante del espejo de tu idolatría…

…un sarcasmo precioso bordado de gorduras…

…el cinismo reverente de la alcoba de media noche…

…y la mofa de la fidelidad cuando sales de repente...

 

…ser tuyo, manantial…

…es plasmarse en el lienzo de tu iris…

…con un rostro muy torpe…

…tropezar con las caricias…

…que tus senos ofrecen…

…y rozar el semblante…

…que en el talle retienes…

 

…ser tuyo, duelo…

…es rendirse al recato…

…que a tu cuerpo protege…

…y conquistar tu reputación…

…con la moneda de la suerte...

 

…ser tuyo mujer…

…es inyectar espinas a las esferas de tus poses…

…recibir tu cátedra de malsanas intenciones…

…y matar a la cordura en la maleza de tus goces…

…amén...

 

2001 junio 5

 

 

VICTOR ABEL NIQUINGA RUIZ