Tal vez tu luna esté escondida
entre el silencio de la noche
o quizás repose en tu regazo
pero quiero ver tu lámpara encendida
y que ilumine el tuyo tibio
y el mío solo corazón
antes que despunte la mañana
y se vaya este lucero celador.
Efraín Gutiérrez Zambrano
De su poemario Alquimia del Amor