El sol de tu mañana se ha apagado
ha quedado dormido, silenciado
y aun siendo yo la vela y tú mi luz, mi amado
este amor, en oscuridad ha quedado
Son lágrimas de angustia, de tormento,
de desesperación y lamento
que se han deslizado por mi piel, aún ardiendo
borrando las huellas para seguirme yendo
Algún día te darás cuenta ángel mío
de lo mucho que te he amado, con desvarío
y sólo entonces entenderás esas lágrimas caídas
que únicamente quisieron decirte “Te Amo sin medidas”
El sol ha muerto, en el desierto se ha quemado
donde mi cuerpo andará perdido en el tiempo inalcanzado
sintiendo que ha dejado de escribirse nuestra historia
esa que un día fue la más bella y hermosa dedicatoria
Sólo fui un barco de poesía en altamar y a la deriva
un náufrago con susurros de ángeles sintiéndome viva
pero el oleaje fue doloroso, ese que lastima
quedando corazón y alma en total desestima